El Asesino de la voz llorosa.

No hablen, solo lean

   Los Estados Unidos son una superpotencia en todos los aspectos, de eso no hay duda, pero no es raro que se cuelen siempre personajes tétricos, extraños, y en su defecto, psicópatas que colmen las primeras planas de los periódicos de dicha nación; sean por tiroteos, amenazas de atentados, desapariciones, y en gran medida en las años 70`s y 80`s, asesinos en serie. Éste ultimo tramo ha significado un cáncer para la sociedad norteamericana; asimismo como una gran fortuna para diversos escritores y cineastas, pues no es un secreto que gran cantidad de películas y novelas del genero de terror o de suspenso han estado basadas en la vida real. Ejemplos perfectos son:
La Masacre de Texas o Psicosis, ambas basadas en los crímenes de Ed Gein, pero eso sera un tema para después.

   Es así, el repertorio de asesinos seriales en Estados Unidos es sumamente amplio. Aunque curiosamente algunos tomen el estatus de leyenda, hay otros que pasan desapercibidos a pesar de su extraño modus operandi.
El día de hoy les presentaré a un asesino en serie no muy conocido, (Tal ves por su reducido numero de victimas) pero que me pareció llamativo desde hace años, cuando vi un especial sobre él en TV.
The Weepy-voiced Killer; por su traducción al español, El asesino de la voz llorosa.

  Pero ¿Quién fue este sujeto o que causo que fuese llamativo hablar de él?  Un solo motivo, el hombre solía llamar a la policía para notificar cuando mataba.

   Sí bien, no se obtiene mucha información sobre este hombre, incluso en diversos sitios en inglés, acá les va su historia lo mas detalladamente posible.
Nacido el 8 de septiembre de 1944 en el estado de Minnesota, bajo el nombre de Paul Michael Stephani, fue uno de diez hijos en el matrimonio de una familia fervientemente religiosa. Su niñez y adolescencia pasaron sin pena ni gloria, en su adultez contrae matrimonio Beverly Lider, mujer con quién tuvo una hija. Paul Stephani trabajó por años como conserje para sostener de esa manera a su familia, sin embargo sería despedido de su empleo en el año de 1977..

No fue sino hasta el año de 1980 cuando Paul Stephani incurrió en su primer intento de homicidio; Pasó la tarde del 31 de Diciembre de dicho año. La victima fue una joven universitaria llamada Karen Potack, la cual se dirigía a su casa tras volver de una fiesta de año nuevo. El hombre fue tras la chica solamente para golpearla salvajemente con un tubo de hierro, apuñalarla reiteradamente en el cuello, y como cereza del pastel, violarla. Horas más tarde de lo sucedido la policía recibió una llamada a las 3 am. Hecha por el mismo Stephani, revelando el crimen mediante sollozos, diciendo textualmente: "Hay una chica lastimada aquí". 

                                                

Escena del Crimen
Karen Potack

Karen Potack

Increíblemente contra todo pronostico, Karen potack sobrevivió al ataque, aunque con serias heridas en su cara, daño cerebral (del cual logró recuperarse meses después), y la garganta abierta, producto de las puñaladas.

   Su siguiente ataque fue perpetrado el tres de junio de 1981. Lamentablemente en esta ocasión si se concretó el homicidio; la víctima fue una mujer llamada Kimberly Compton.

Kimberly Compton

 Nuevamente la policía se enteró del crimen por una llamada realizada por Stephani, llorando al otro lado de la linea, diciendo: "¡Maldita sea! ¿pueden encontrarme? Acabo de matar a alguien con un picahielo. No puedo detenerme. Sigo matando gente".
Efectivamente. Kimberly Compton de 18 años había sido apuñalada reiteradas veces con un picahielo y abandonada en la vecindad de St Paul en Minnesota. La búsqueda del asesino no se hizo esperar. Sin embargo, dos días después una nueva llamada fue realizada, pero esta vez no a la policía sino a un periódico local. En la llamada el homicida dijo a los miembros del medio que varios datos publicados sobre el homicidio de Compton eran inexactos.

   Una semana después, el 11 de junio, Stephani llamó nuevamente a la estación de policía llorando y pidiendo perdón por lo hecho a Kimberly Compton, ademas de asegurar que se entregaría. Obviamente, esto no sucedió.
Tras todas estas llamadas se ganó su apodo del asesino de la voz llorosa. Pues en cada llamada el hombre rompía en llanto o en sollozos, de esta manera (quizás sin quererlo) su tono de voz se distorsionaba hasta sonar totalmente distinta.

   Su siguiente víctima seria Kathleen Greening; éste homicidio fue el único que no sería reportado a la policía por Stephani, aunque años después de su sentencia admitiría haberla ahogado en una bañera en la residencia que ella poseía en Roseville.
Pasaron aproximadamente cuatro meses antes de que se reportara un nuevo ataque.
La cuarta victima y tercer homicidio en fila, seria Barbara Simons, una enfermera de 40 años de edad. En esta ocasión ambos coincidieron en un bar, y tras un rato juntos Barbara Simons le comentaría a una mesera del lugar lo lindo que le parecía Paul, agregando: "Espero que sea agradable, ya que se ofrece a llevarme a casa". Su cadáver fue encontrado al día siguiente en el rió Mississipi. Cabe destacar que esta mesera reveló a la policía que Paul Stephani fue la ultima persona con quien vio a Barbara la noche de su muerte.

   Tras el asesinato de Barbara nuevamente el teléfono de la policía sonó. La llamada en cuestión decía: "No hable. Solo escuche. Lamento haber matado a esta mujer, la apuñale 40 veces. Kimberly Compton fue mi primera victima en St Paul".

Barbara Simons

Escena del Crimen Barbara Simons

   Finalmente llegaría la captura de Paul Michael Stephani. Todo comenzó cuando éste solicito los servicios de una prostituta de 21 años llamada Denise Williams, para tener sexo en el apartamento de ella.

Denise Williams

   Una vez en el auto, Denise comenzó a sospechar, notaba algo extraño en el comportamiento de Paul. Las dudas de convirtieron en realidad luego de que giraran en una calle sin salida y el hombre procediera a apuñalar a Denise unas 15 veces en el estomago. La joven logró salvarse al tomar una botella que estaba en al auto, romperla y cortarle la cara a su agresor, Durante el forcejeo un hombre escuchó los gritos y corrió en ayuda de Denise, Stephani al verse acorralado decidió huir del sitio.

Automóvil de Paul tras el suceso con Denise Williams 

El extraño, sin perder tiempo llamó a la policía para explicar el acontecimiento; por su parte, Paul Michael Stephani logró llegar a su apartamento, notando un fuerte sangrado en su cara, por lo que decidió salir de nuevo para ir al hospital. Las heridas en su rostro, mas la llamada realizada al 911 en la cual daban una descripción hecha de parte del hombre que ayudó a Denise en el ataque, sirvió como conexión para que las autoridades procedieran con la captura.  Finalmente el asesino de la voz llorosa fue atrapado.

  Paul Michael Stephani recibió un juicio en donde su primera esposa, su hermana y otra pareja que este tuvo, creían que si fue el quien llamó a la policía luego de los homicidios, sin embargo, las declaraciones fueron descartadas por un tiempo, tal y como se dijo anteriormente, el llanto alteraba el tono de voz ademas de distorsionarla. 

  Stephani, fue sentenciado a 40 años de prisión. Tiempo después de ser sentenciado confesaría todos los crímenes a la policía. Murió en la cárcel el 12 de junio de 1998 a la edad de 53 años.

Audios

https://www.youtube.com/watch?v=D80eHSzJRWo